Nueva visita a un mundo feliz

AUTOR: Aldous Huxley

GÉNERO: ensayo.

EDITORIAL: Anaya editores, S.A. (México).

EDICIÓN: No figura. La primera edición es de 1958.

IDIOMA: español.

Nº PÁGINAS: 130.

LA CITA: página 130.

“… algunos de nosotros todavía creemos que los seres humanos no pueden ser completamente humanos sin libertad y que, por tanto, la libertad es supremamente valiosa. Tal vez las fuerzas que actualmente amenazan a la libertad son demasiado fuertes para ser resistidas por mucho tiempo. Sin embargo, tenemos el deber de hacer cuanto podamos para resistirlas.”

Resulta llamativo que un libro publicado en 1958 exponga tan claramente algunas cuestiones relativas a la libertad (y por extensión a la privacidad) tan presentes hoy en día. Seguramente no es la primera vez que leemos un libro escrito hace tiempo y pensamos que podrían haberlo escrito ayer.

Se trata de un texto que analiza cuestiones de fondo (como la propaganda y el arte de vender), que afectan a las sociedades del mundo entero, de una forma clara y directa.

He de puntualizar aquí que para una adecuada comprensión de este libro es necesario leer previamente “Un mundo feliz”, distopía que escribió el mismo autor en 1932 y que es analizada en “Nueva visita a un mundo feliz”. También se hace alguna mención a la novela “1984” de George Orwell, si bien las referencias a esta última están lo suficientemente justificadas como para entenderse sin problema aunque no se hubiera leído esta novela.

Aunque no estoy de acuerdo con todas las ideas expresadas en el libro, sin duda me parece una lectura muy interesante.

Las cuestiones sobre las que versa se hacen especialmente relevantes ahora. Ya no solo refiriéndonos por “ahora” a principios del siglo XXI, sino más aún ahora mismo en estos tiempo de pandemia donde nuestros miedos justifican más que nunca aquello de “el fin justifica los medios”.

Es maravillosa la capacidad de adaptación del ser humano. En un momento de necesidad le expones a algo que no habría aceptado en otras circunstancias de ningún modo. Poco después ya está acostumbrado y apenas se revela contra ello. Con la privacidad llevamos discurriendo por ese camino demasiado tiempo, y la situación actual solo agrava el problema.

En este sentido hay un capítulo dedicado a las condiciones en las que la gente es más fácilmente influíble que resulta de lo más interesante. Así, el lector será capaz de reconocer varias de las técnicas indicadas en el libro en nuestra vida cotidiana sin ningún esfuerzo, pues una vez descritas son muy evidentes. Conocer el funcionamiento de estas técnicas persuasivas (quizá haya gente a quienes les suene mejor “comerciales”) es el primer paso para identificarlas y poner en marcha el pensamiento crítico que sirve para defenderse de ellas. Exactamente igual que ocurre con las adicciones del comportamiento (ver Irresistible. ¿Quién nos ha convertido en yonquis tecnológicos?).

También resulta esclarecedora esa visión de un feudalismo moderno que seguramente tan polémica les resultará a algunos y tan cristalina a otros.

Es por ello que os recomiendo leer este ensayo de Huxley, repleto de cuestiones que dan que pensar, y luego reflexionéis acerca de la sociedad en la que vivimos. Cada uno que saque sus propias conclusiones.

Por último, como anécdota comento que el ejemplar que tengo no tiene por ningún lugar la fecha de edición ni de impresión. Cosa curiosa sin duda.